Casa Kenji
La casa se eleva como un manifiesto de la ligereza estructural y la transparencia habitable, fusionando acero expuesto y madera cálida en un equilibrio entre lo técnico y lo humano.
Su lenguaje formal racionalista, con volúmenes suspendidos y grandes superficies acristaladas, expresa una ética de apertura hacia el paisaje, en diálogo con el entorno natural, donde la arquitectura deja de ser límite para convertirse en puente entre el ser y su contexto
Se propone en su interior con estructuras de acero-madera a la vista.